Tecnología de Almacenamiento de Aire Líquido (LAES)

La tecnología LAES (Liquid Air Energy Storage), almacena energía comprimiendo y enfriando aire hasta llevarlo al estado líquido, lo que permite almacenar grandes cantidades de aire (y por tanto de energía) en un espacio reducido.

Para recuperar la energía se sigue en proceso inverso, calentando hasta evaporar el aire y finalmente descomprimiendolo en una turbina para generar electricidad.

El proceso comienza con la compresión de aire atmosférico. A causa de la compresión, el aire se calienta hasta 400 oC y ese calor se lleva a través de un intercambiador y se almacena en tanques de sales fundidas para su posterior utilización. Esto es lo que se llama el “almacén de calor”. A continuación, en el proceso de licuefacción, se enfría el aire hasta una temperatura alre- dedor de -160 ºC. Para extraer el calor se utiliza otro fluido, que también es almacenado en un tanque para su posterior utilización, conocido como “almacén de frío”. Una vez en estado líquido, el aire se almacena en tanques hasta que llegue el momento de recuperar la energía. Para recuperar la electricidad se hace pasar el aire líquido a través de una serie de intercambiadores, primero con el fluido del “almacén de frío” para su evaporación y posteriormente con el “almacén de calor” para volver a una temperatura alrededor de 400 oC. Una vez a alta presión y alta temperatura, el aire se expande en una turbina de gas para producir electricidad.